Es algo muy saludable que recomiendo a todo grupo de amigas, porque vienes como nueva después de conectar y pasar por una buena sesión de risoterapia, otra de "ver cosas que te gustan" y otra de "gastar algo de dinero que habías ahorrado para la ocasión".
He de decir que hacía "algo-bastante" frío para nuestros cuerpitos canarios...., pero lo llevamos bien. Además fue un fin de semana estresante...., por el cierre de Spanair....adivinais con que compañía volvíamos?....pues sí. Pasamos algunos "nervios" desde que nos enteramos durante la cena hasta el día siguiente que todo se solucionó...aunque he de decir que nos lo tomamos con mucha filosofía. La peor de las opciones pasaba por pagar un billete nuevo y pasar un día más en Bilbao...
El viernes llegamos a media tarde y, por supuesto, nos recibieron con una caida de lluvia espectacular que limpió nuestras maletas y nuestror paraguas mientras buscábamos donde estaba el hotel.
Luego salimos a pasear por el casco viejo y repusimos nuestro calorcito con unos riquísimos churros calentitos y nada grasientos, por cierto.
Y luego cenamos en el café Bilbao. Entre pintxos, calamares y croquetas...había que reponer fuerzas.
Al día siguiente y después pasar el día entero en el Salón de la Feria, nos fuimos a cenar para celebrar que era el cumpleaños de Fátima. Escogimos entre los cuatro restaurantes que nos habían recomendado y nos decidimos por La Deliciosa.
Pedimos unos entrantes a base de ibéricos, quesos, patés y croquetas....todo buenísimo...
Solomillo ibérico con salsa de naranja y compota de manzana
O solomillo con salsa de queso.
La otra mitad nos decidimos por un arroz con langostinos, almejas y mejillones....pero no fue lo que esperábamos...., en absoluto. Y las cuatro estábamos de acuerdo. Lo cual no quiere decir que el resto de la cena y el trato fueran estupendos.
Nos gustó el muro del mostrador que separaba el restaurante de la cocina. Era un muro hecho con libros...y se podía leer los títulos...
Nos gustó el muro del mostrador que separaba el restaurante de la cocina. Era un muro hecho con libros...y se podía leer los títulos...
El domingo, durante la mañana, nos dió tiempo a pasar por una pastelería con unas vistas encantadoras...
Y en el desayuno...más pintxos!!!!
Dimos una vuelta para ver el Guggenhaim, el paseo por el río con el mercado de las flores y volver al casco viejo..., donde comprar unos bocadillos de ibéricos para llevarlos como alternativa a la comida que "ofrecen" en el avión.
En definitiva, un viaje muy aprovechado y estupendo. El año que viene a Zaragoza en Febrero....
En definitiva, un viaje muy aprovechado y estupendo. El año que viene a Zaragoza en Febrero....
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